No mires para otro lado
No te escondas
No te seas más
Que para ti mismo
Que los dos acordes desafinados de la vida
Siempre llegan a destiempo
Y llenos de lágrimas
No
No te sonrías cuando la noche llegue a
verte
Cuando la luna se vista de desconsuelo
Hay momentos en que es mejor dormir sin
soñar
Acaramelarse de uno mismo
Y salir a la calle solo para abrazarse a la
belleza
(Modisto)
No hay comentarios:
Publicar un comentario