sábado, 28 de septiembre de 2013

MUDANZA



Las aventuras de Deperente II

El coche no quería arrancar aquella mañana fría de octubre. Y miró con nostalgia a su vecina del piso de abajo a través del cristal y del baile de los limpiaparabrisas, cómo dirigía a los rudos hombres del camión de mudanzas con gesticulación serena y firme. Deperente sabía que el caso que estaba investigando se hallaba en tiempo muerto y que no iba a avanzar si él llegaba pronto a la cita. Por eso, decidió seguir mirando a la vecina de piernas largas y melena triste, con la que jamás había intercambiado palabra más allá de los obligados saludos y despedidas, durante los dos años que casi habían vivido juntos, él arriba y ella abajo. Y empezó a lamentarlo.



(Modisto)

sábado, 21 de septiembre de 2013

CUANDO EL HORIZONTE ESTÁ TAN CERCA


Tengo el tiempo justo
De engendrar círculos solitarios
De recibir
Manos extendidas en tensión
De acomodarme
A pasos peregrinos huérfanos de respuestas
Ya miro
Por una ventana sin hueco
Hacia un horizonte hecho trizas
Y amueblado
Por el naufragio de las palabras



(Modisto)

domingo, 15 de septiembre de 2013

IDAS Y VENIDAS



Esto es porque
Y después se va
Y después
No mucho más tarde
Y bastante más alejado del ahora
Como abrazo
Y como besos
Viene lo inesperado
Del hasta luego
Del hasta que será nunca
Del hasta qué será
Siempre
Es una palabra demasiado gigante
Y no mientras
Que durante
Casi permanece un ratito
Pero después
También se va
Como todo




(Modisto)

lunes, 9 de septiembre de 2013

NO, PERO SI YO




Las aventuras de Deperente I

El agente Deperente del Departamento de Policía del Amor, halló el cadáver en una esquina olvidada muy lejos de la Quinta avenida, a las trece horas y cuarenta y cinco minutos, justo un minuto después de sentir un vértigo en las tripas a pesar de no haber probado bocado desde la tarde del día anterior. Pero al ver a la mujer de unos treinta y cinco años con la soga al cuello y la color de la piel perdida, ese vértigo se convirtió en náuseas incontroladas, y vomitó una bilis de color verde que le produjo un mareo de no saber ni de dónde ni de cuándo.

Más que por nada, era por comprobar que la joven tenía tatuado su nombre en el brazo izquierdo, por lo que le subió la manga de la blusa, tras el humo de su cigarro, y así certificó, después de fijarse un rato de segundos innecesarios que ella había sido su novia de la infancia, y que había caído en el tumulto de la prostitución y las drogas.

Deperente, después de secarse las últimas babas que le caían ya sobre el pecho, le dijo a su ayudante, No, si estoy bien, ella se llamaba Secominuca, era un acorde desafortunadamente afinado, y yo aún la amaba.

(JP Modisto)

domingo, 1 de septiembre de 2013

SÓLIDO ESPEJO ROTO




 
Sólidas las líneas de la sangre
El espejo miente cuando te dice
En las ocurrencias de la tarde
Que en la ternura de un niño
Se esconde la maldad de un adulto


Yo sé
Que prisioneros somos todos
Más que de las luces de las sombras
Y que en cada esquina
Acaudalado de silencios rotos
El mar se agolpa en su huida
Formando estanques de dolor
En millones de estrellas marchitas


(Modisto)