Casi no había nada
Casi no hay nada
Si dijera que solo el silencio
O solo una voz
Mentiría
Y se agolpaban las palabras
Y casi todas las caricias
Y así y todo
Casi nada
Casi lo que no quedaba
Y casi ni una brizna de aire
Y eso que me faltaba
Porque yo estaba
Arrodillado como siempre en la orilla
Y veía anochecer
Y me veía como un pelele en el espejo
Y casi sin sentir
Y casi sin llorar pero llorando
Y casi sin un lamento
Y yo comprendía
Pero no quería comprender
Saltaba
Y caía
Y me revolvía desde las entrañas
Y me dejaba nacer
Y cuando todo estaba hecho
No me dejaba no ser
(Modisto)
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