domingo, 3 de noviembre de 2019


REGISTRO DE PARAGUAS PERDIDOS

XLIX

El día del chaleco fue un día de sueños y de luces y de colores, sin sombra alguna y sin a su vez ningún horizonte, como los días de donde uno no espera nada y realmente, al final, no consigues nada, pero acabas tumbado en una cama desconocida mirando al techo y abrigado por un ridículo chaleco fosforescente como un olvidado jinete eléctrico.

(Modisto)

No hay comentarios:

Publicar un comentario